Trucos
Bowi

Todo lo que necesitas saber para que no haya margen de error a la hora de ponerte manos a la obra con la misión croqueta

Aceite del bueno, freidora o cazo y mucho cuidadito
Ponte el delantal y al lío

Empieza el festín croquetil. Sigue nuestros trucos y consejos

Recibirás tu caja Bowi con las croquetas refrigeradas.
Durante el envío, en todo momento se conserva la cadena de frío, por lo que cuando las recibas puedes consumirlas en el mismo día o reservarlas en la nevera hasta 48h.

No te recomendamos que las congeles en casa, aunque si lo hicieras no pasaría nada porque no peligra la seguridad alimentaria, pero podrías notar cambios en la textura de la bechamel al descongelarlas. Nosotros que somos muy tiquis preferimos aconsejarte que no las congeles.

Si vas a freirlas con una freidora basta con que las sumerjas unos 3 o 4 minutos en aceite a 180º (más o menos), pero si eres de hacer estas cosas a ojo, déjate llevar por el color doradito que más te guste.

Si no tienes freidora puedes cocinarlas en un cazo. LLénalo de aceite para asegurarte que las croquetas quedan cubiertas y con muuuucho cuidadito de no romperlas ve dándoles la vuelta. Bastarán 3 o 4 minutos para dejarlas en su punto.

Tanto si usas freidora como cazo, te recomendamos que utilices aceite de girasol, ya que el aceite de oliva puede resultar muy intenso y puede confundir los sabores de las croquetas.

Como norma general, trátalas con mucho cariño. Las Bowi son muy delicadas porque su alma de bechamel es ligera y cremosa. No hemos hecho un mazacote que lo aguante todo.

Sopla.
No seas ansias, que una lengua quemada escuece mucho.

Configura tu caja de croquetas

Puedes configurar tu caja de 24 unidades y combinar 4 sabores a elegir

¡Vamos!